sí, te quiero verde: LOS SCONES MÁS RICOS DEL MUNDO!

Hola amigos. Finalmente ha llegado el verano. He estado en Londres cocinando y paseando. Fue el cumple de mi hermana menor, entonces decidí hacerle estos scones para el desayuno a modo de festejo. El título del post es fuerte, lo sé. Pero habiendo probado MUCHOS scones a lo largo de mi corta vida, me atrevo a hacer tal declaración. Estoy abierta a escuchar todo tipo de opiniones, si tienen alguna buena receta de scones los invito a que la compartan y armemos un debate. El mejor scone del mundo.

Antes que nada quiero contarles que en esta receta no hay ni harina integral, ni es vegana ni na! Es una de las pocas cosas que hago tal cual lo indica su receta original. Éstos scones son especiales, son muy distintos al típico scone que estamos aconstombrados, o al menos yo. Tienen una consistencia arenosa, una sabor a vainilla bien fuerte, son dulces pero tienen un toque de frescura que se los da la fruta.

Una amiga me habló de un lugar que se llama Big Sur Bakery, queda en Big Sur en el norte de California. Hace un tiempo tuvimos la suerte de recorrer gran parte de la costa californiana y la mítica ruta 101. Entonces cuando llegamos a ese pueblo mágico rodeado de arboles inmensos no dudamos ni un instante en parar a comer algo en la bakery (aunque la verdad no fue fácil de encontrar y casi nos rendimos!!) Pero no nos desilusionó! Tienen un horno de barro donde cocinan todo tipo de delicias, dulces y saladas y se puede ir a desayunar o a comer algo a lo largo de todo el día.

Fue allí donde probé sus "famosos scones". Habia de frutilla porque era la fruta de estación, pero van variando de sabores. En invierno los hacen con jengibre caramelizado. Mmmm.

Tuve la suerte de conseguir su receta y hoy la comparto con ustedes. Gracias Big Sur Bakery!

Las frutillas ecológicas están buenísimas! Fuimos al mercado y había cerezas, frutillas, damascos y duraznos, toda mi fruta preferida! Creo que en verano hay que aprovechar la abundancia. Ya que luego hay que pasar largos meses a pura manzana, que no es que no me guste pero no me fascina tampoco.

Con respecto a la receta: si quieren usar azúcar negra en vez de la blanca, los invito a que prueben y me cuenten como les salió! La traducción de buttermilk al español es "suero. En Estados Unidos y en Inglaterra lo venden en los supermercados, en España no. Entonces lo que suelo hacer es mezclar yoghurt con un poco de leche para lograr una consistencia mas líquida. Lo importante es que tenga ese sabor medio ácido.

SCONES
12 unidades

1 taza de frutillas cortadas (o la fruta que deseen)
227 grs. manteca, cortada en cubitos bien fria
490 grs. harina común
200 grs. azúcar
1 cda. polvo royal
2 cditas de bicarbonato de soda
1 1/2 cdita sal
2 cdas esencia de vainilla
200 grs. buttermilk (mezclar 3/4 de yogur con 1/4 de leche)
Azúcar morena para terminar

Precalentar el horno a 190 grados.

En un bowl poner la harina, el azúcar, el polvo royal, el bicarbonato y la sal. Mezclar. Hacer un hueco en el centro y colocar la manteca en cubos. Trabajar la masa con las yemas de los dedos hasta lograr una consistencia arenosa. Hacer otro hueco y ésta vez agregar el buttermilk junto con la vainilla. Mezclar con una cuchara de madera hasta formar una masa despareja. La clave está en no mezclar de más. Agregar la fruta cortada y mezclar.

Usar un molde o cortante de 7cm y rellenar sobre la placa donde se va a cocinar. Apretar bien para que se una y la parte de arriba del scone quede chata. Quitar el cortante y seguir con otro scone. Dejar espacio entre uno y otro ya que cuando se cocinen, se expandirán.

Repetir la operación hasta terminar la mezcla.

Espolvorear con azúcar morena y cocinar durante 15/20 minutos.

Deben quedar dorados por sus lados pero tiernos en el centro. Una vez listos, dejar enfriar por 10 minutos antes de comer (muuuy difícil!)